LOS AMANTES

El 21 de septiembre a las 18.30 h, el Museo Casa de Yrurtia presenta Los Amantes, una intervención artística de lxs artistas tucumanxs Rosalba Mirabella y Rodro Cañás, en el marco de su programa Experiencias Federales.

Esta intervención es el resultado de la investigación realizada por los artistas sobre el patrimonio del museo. A la mirada de los artistas, el lugar no solo atesora los proyectos, obras y bocetos de un gran escultor, sino también la producción de dos mujeres que estuvieron vinculadas al arte y al amor. Como toda casa, el museo es un lugar lleno de rincones, de pequeños objetos e historias innarradas.

En Los Amantes, las marcas de Gertrudis, Rogelio y Lía son revisitadas por Cañás y Mirabella en un acto de reinvención.

En su carácter de museo nacional, Experiencias Federales responde a una concepción federal de la cultura, con acciones que fomentan la cooperación e intercambio con instituciones afines y con artistas de diversas regiones del país. El programa tiene como objetivo promover la vinculación entre artistas y la institución museo, con especial énfasis en prácticas artísticas no localizadas en la Ciudad de Buenos Aires.

El proyecto Los Amantes se desarrolló durante el transcurso de un año entre Tucumán y Buenos Aires en colaboración con el museo Casa de Yrurtia y contó con el apoyo de la beca Activar Patrimonio, otorgada por la Dirección Nacional de Gestión Patrimonial y la Dirección Nacional de Museos del Ministerio de Cultura de Presidencia de la Nación.

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Los Amantes.
Una historia que no fue.

Rosalba Mirabella y Rodro Cañás llegaron al museo Casa de Yrurtia por una invitación del programa Experiencias Federales, en el marco de la Beca Activar Patrimonio. Atrapados por la historia del lugar, las locaciones eran perfectas para intervenirlas todas, pero por cuestiones de conservación y protocolos decidieron trabajar con la escala de una casa devenida museo, y con las historias de sus dueños: Gertrudis Radersma, Lía Correa Morales y Rogelio Yrurtia. Asimismo los artistas se interesaron en posibles vinculaciones con otras casas museos del norte del país.

A lo largo de un año Mirabella y Cañás pasaron horas charlando en bares. En estas conversaciones los temas saltaban desde la actualidad a noticias, presupuestos, deseos nuevos, proyectos, convocatorias, viajes, vida cotidiana, obligaciones, el paso del tiempo, novelas, trabajo en relación de dependencia, los libros más caros del mundo, predicciones, horóscopo chino, astrología, ciencia, medicinas alternativas, mascotas, ecología, incluso la vida más allá de la muerte. Eran encuentros donde se experimentaba la sensación de atravesar un agujero negro, todo se transformaba en otra cosa, era una explosión de belleza exquisita. Así es que empezaron las listas infinitas marcando una consigna: trabajar desde adentro hacia afuera, en un estado de beso, como dice la artista Diana Aisenberg en su libro MDA.

En ese tiempo, fueron apareciendo marcas, notas, lo público y lo privado, el lugar donde sus obras se acercaban. En ese lugar intermedio, entre las cosas y los objetos, es donde decidieron ubicarse. Siempre hay algo en el medio, una interferencia, una mancha, una sombra, un amor… ¿Es eso lo que podría unirlos?

¿Qué es el amor y cómo nos afecta? 

A partir de varias listas de preguntas y frases anotadas en papeles de diferentes formatos es que empezaron una investigación no formal para diseñar una muestra en el museo Casa de Yrurtia. Pasaron por varias disciplinas, algo muy característico en ellos, probaron diferentes materiales, pero en el proceso de edición sacaron casi todo, volvieron a las charlas de los bares, a las anotaciones y bocetos, las fotos espontáneas y las capturas de pantallas de sus celulares.

Finalmente, todo ese material es el contenido de un libro-objeto de 160 páginas que se exhibe en el museo junto a las intervenciones de los artistas. En el libro se intercalan el blanco y negro típico de una fotocopia, collages, pinturas, anotaciones, dibujos  y fotos a color.

Todo el material de este libro es pura ficción. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. 

A modo de conclusión, Mirabella y Cañás dicen que hablar del amor es como intentar hablar de la memoria, una sustancia invisible que se expande por el espacio, que lo abarca todo y nos deja esa sensación extraña, como cuando se sale de una fiesta y en los oídos siguen retumbando las canciones ya escuchadas. Entonces son los recuerdos los que nos tienen amarrados a algo o a alguien, por eso, en base a ésta experiencia, creen que la definición de amor podría ser tan amplia que es mejor dejar pasar este momento y hacer silencio. 

Si fuese ahora el final de esta película seguro en la pantalla veríamos por unos segundos frases escritas, algo así como conjuros o hechizos, anotaciones sobre objetos o una tela colgando, para luego fundir todo a negro. 

      

       Dicen que sólo los amantes saben de lo extraordinario 

                 y del horror de estar vivos

Texto: Rodro Cañás y Horacio Silva (en base a las notas producidas por los propios artistas).

Testimonio de Andrea Elías

Testimonio de Rosalba Mirabella

Testimonio de Rodro Cañás